LENTES PARA LA MIOPÍA PETROLERA (I/II)
Rafael Gallegos 668
Venezuela se caracteriza por poseer inmensos recursos naturales que no ha sabido convertir en riqueza. Sin dudarlo es el país de las oportunidades despilfarradas. ¿Cómo es posible que teniendo tantas reservas de petróleo y de gas, mucho sol y mucho viento, caudalosos ríos etc. etc. etc. seamos uno de los países más pobres de América?
Es hora de ver el futuro sin miopía. Con lentes, lupas, o telescopios
bien orientados. De desarrollar una Visión Petrolera que sirva de norte para
aprovechar la inmensa oportunidad que nos dan los hidrocarburos y transformar a
Venezuela en un país de primera. Les invito a filosofar un poco:
LO QUE NO
QUEREMOS (MIOPÍA)
No queremos visiones cortas y borrosas que consideren un reto
llegar a una producción petrolera de un millón de barriles por día (asintóticos
todos los años porque nunca lo logran), cuando según la OPEP ni siquiera
llegamos a los 900,000. Lo grave no es la cifra, es la miopía, porque el
verdadero reto tiene que ser llegar a tres
o cuatro millones de barriles por día. Lo demás es… oportunidades perdidas, que
se reflejan en hambre, escasez, hospitales enfermos, educación paupérrima, etc.
No queremos refinerías al 20% de su capacidad que dejen a
Venezuela con colas y frustración en las estaciones de servicio, o a los
agricultores varados por gasoil.
No queremos un país venteando y quemando más de mil millones de
pies cúbicos de gas todos los días, más que el consumo de Venezuela. Eso
significa contaminación, desempleo, y divisas que se dejan de generar.
No queremos amas de casa sufriendo por la escasez de gas, y con
bombonas inseguras de alto riesgo.
No queremos una petroquímica casi paralizada.
Ni un pírrico y despilfarrado ingreso de divisas, que no
puede cubrir las necesidades básicas del país.
LO QUE SÍ QUEREMOS
(VISIÓN)
Una industria petrolera capaz de producir tres o cuatro millones
de barriles de petróleo por día. Que desarrolle el potencial de la Faja, de
oriente y de occidente para que genere empleos, economía conexa, divisas que
faciliten la resurrección del país.
Unas refinerías
a plena capacidad manufacturando más de un millón de barriles diarios, haciendo juego con
Citgo. Que produzcan y exporten gasolina, gasoil y una gama de productos.
En cuanto al gas, sí queremos una
industria gasífera que:
- Provea de gas directo a la mayoría de los hogares.
Así como bombonas de gas seguras, oportunas y sobre todo llenas.
- Procese el
gas que hoy se desperdicia en Monagas.
- Reinicie los
procesos exploratorios en gas, para que Venezuela se ubique entre las cinco reservas del mundo, y que produzca
abundante gas licuado (GNL) para participar en los mercados más
importantes del mundo, aprovechando los ingentes yacimientos de nuestro Mar
Caribe.
- Facilite el renacer pueblos gasíferos
como por ejemplo Anaco, cuya estrechez económica reposa sobre una importante
reserva de gas, mientras éste escasea en
las comunidades aledañas y en el país.
- Genere una producción de
gas y gasoil que sea suficiente para el funcionamiento de las plantas eléctricas, minimizando los
continuos apagones.
- Así como el gas necesario para dinamizar las empresas
de Guayana y de la industria en general.
- Que contribuya con la Petroquímica,
que sí genera nuevas economías. La petroquímica es el petróleo del futuro.
¿Es mucho pedir? No, es lo menos que exige nuestro inmenso nivel de
recursos. Es obligatorio ir al examen de reparación para aprobar la
Parábola de los Talentos, porque estamos raspados.
LA MAR DE
OPORTUNIDADES
Las proyecciones indican que el consumo de petróleo en el mundo va a
crecer por lo menos hasta el año 2045, horizonte más que suficiente para
desarrollar una poderosa industria petrolera en Venezuela. Esto se debe a que
las energías alternas, no se han desarrollado a la velocidad esperada.
El gas dejó de
ser la hermanita pobre del petróleo. Su utilidad crece año a año. Y el gas licuado
(GNL) permite, con metaneros, el
transporte hacia cualquier parte del mundo. Por otra parte Europa, ya no va a
depender más de Rusia, lo que podría aprovechar Venezuela. Y aquí en Venezuela hay
toda una industria del gas por desarrollar.
Nuestras
potencialidades de sol y viento obligan a desarrollar energía solar y eólica, que en conjunto con los
hidrocarburos y con otras energías como la hidráulica, deben ser aprovechadas
para convertir a Venezuela en el Hub Energético de las américas.
Es decir en un país exportador de todos los tipos de energía.
La Captura y Almacenamiento de Carbono (CAC), es una tecnología en
desarrollo, que permite atrapar el CO2 de las operaciones de hidrocarburos y
transportarlo en ceodosductos hasta yacimientos de petróleo agotados. Esta
tecnología (todavía en desarrollo, pero con oportunidad de convertirse en
disruptiva) muestra la oportunidad de Limpiar el Petróleo y minimizar su
efecto contaminante, lo que sin duda ampliará significativamente el horizonte
de la industria de hidrocarburos.
El vecindario de
Venezuela está integrado por países con diverso
potencial petrolero. Colombia, Ecuador y
Perú tienen pocas reservas, México es un gigante dormido por obra y gracia de
mentalidades socialistoides, Brasil un gigantesco productor que consume casi toda
su producción, Argentina un magnífico proyecto a mediano- largo plazo con
dificultades de ubicación y de infraestructura. Surinam está apenas haciendo
pininos en el negocio. Guyana podría superar el millón de barriles alrededor
del 2030, que sí competirán con la producción de Venezuela, aunque no muy
significativamente. En cuanto a Venezuela, posee gigantescas reservas,
tradición e infraestructura para convertirse en la potencia exportadora de la
zona.
Por otra parte, Canadá exporta más de tres millones de
crudo muy pesado a Estados Unidos que se procesan en las refinerías del Golfo
de México, ha ocupado espacios dejados libres por el bajón de producción
venezolano, pero no tiene proyectado incrementar significativamente su
producción. Estados Unidos, con el
petróleo de lutita ya superó los 13 millones de barriles por día y según Trump
aspiran a unos dos más. La realidad es que Estados Unidos no tiene como dijo su
presidente, las mayores reservas de petróleo del mundo, al contrario, las
proyecciones indican que en pocos años
comenzarán a declinar, lo que es una oportunidad para Venezuela.
Los expertos dicen que las refinerías venezolanas se pueden
rescatar con unos diez mil millones de dólares. La cifra es alta, pero
rentable. Abriría la ventana de procesar
en Venezuela y Citgo (es imperativo que siga siendo venezolano) cerca de dos millones
de barriles diarios.
La potencialidad de Venezuela radica en que – con gerencia de primera- puede desarrollar tres o cuatro millones de
barriles de petróleo en pocos años, y significativas cantidades de gas que
compitan en los mercados aprovechando las oportunidades descritas.
LOS FALSOS PARADIGMAS
No es suficiente
tener reservas petroleras para ser ricos… por ejemplo Venezuela.
Hacen falta inversiones, tecnologías, gerencia estratégica, tres cosas de las
que adolecemos.
Y también es imperativo sacar de la mente creencias retrógradas que no
nos permiten avanzar. Por ejemplo:
-
El petróleo fluye solo… No se trata de soplar y
hacer botellas.
-
La soberanía consiste en
que el estado opere el negocio, y si es el partido de gobierno, mejor… Pdvsa ha demostrado lo
contrario.
-
Las sanciones son las
culpables de la debacle de Pdvsa… Antes de llegar a esa conclusión hay que revisar la politización, la
botada de los 23.000 trabajadores y la politización, para buscar las causas.
-
El ministerio y Pdvsa
deben estar bajo la misma cabeza… Algo así como pagar y darse el vuelto
-
Los productos del
petróleo son del pueblo, por lo que la gasolina, el gas, el gasoil y etc. deben
ser subsidiados y hasta gratuitos… Las empresas pierden mucho dinero y a la larga perjudican
el propio servicio
-
La industria petrolera debe
ser manejada por el partido de gobierno… Así no se puede
competir con Shell, BP, Exxon etc.
-
Para ser directivo de
Pdvsa no hace falta ser petrolero… sin comentarios
-
Es más negocio venderle a
China que a Estados Unidos… Algo así como el que tiene un
kiosco en Petare y los clientes en Catia.
- Las empresas petroleras siempre dan ganancias… A la historia me remito.
Continuará…
Muy bien Rafael, dejando en ridículo la mentalidad obtusa de la política petrolera ejecutada por el régimen en estás dos décadas y media. Un abrazo
ResponderEliminarGracias Luis.
EliminarLa verdad es que es increíble lo que han hecho con la industria.
Un gran abrazo.
Leyendo tu excelente artículo, no tengo ninguna duda en resumirlo en dos frases: 1. No mas PetroEstado;
ResponderEliminar2. No mas socialismo ni del siglo XX (alli nació el PetroEstado en medio dela mayor bonanza jamas vista previa al Chavismo en Agosto 1977 con la Gran Venezuela y sus estatizaciones) y mas nunca la del Siglo XXI
Gracias Evanán. Muy cierto, hay que superar esas concepciones. Un gran abrazo y mil gracias!!!
EliminarEl comentario de compras de refinerías en el exterior se pagan con las cantidades de petroleo que tenemos en la actualidad que son los insumos que dichas refinerias necesitan. La cifras me parecen mas bajas que el estimado que mencionas, Saludos Omar Ferrer
ResponderEliminarHoola Omar. Buena idea, así habrá que hacer. Pagar con petróleo.
ResponderEliminarUn gran abrazo y gracias!!!