RÓMULO BETANCOURT HOY

 

RAFAEL GALLEGOS BLOG 624

Rómulo Betancourt perteneció a la llamada generación del 28, que fue puntal en la lucha por implantar la democracia. Los jóvenes se propusieron tumbar al tirano Juan Vicente Gómez, implantar un régimen de libertades y abrir a Venezuela al mundo. Desafiaron al dictador en el carnaval de 1928. Eligieron a la Reina Beatriz I y pronunciaron discursos que retaban a la dictadura: Pio Tamayo lamentó la pérdida de su novia Libertad, Jóvito Villalba no le quería cantar a Lindbergh; sino a la boina azul del estudiante. A Betancourt, Otero Silva, Leoni y muchos otros, su verticalidad política les redundó en cárceles, grillos, torturas, persecución, exilio.

Cárceles como la de Jóvito Villalba, que estuvo … siete años… engrillado en los pies y conviviendo con roedores y alimañas en terribles mazmorras. O como les tocó a Betancourt, Leoni, Valmore Rodríguez y muchos otros exiliados pasando privaciones y hambre en el extranjero.

“Cumplí veinte años tirado sobre el cemento de un calabozo, remachados los pies por grillos de hierro…” escribiría años después RB.

Esa misma generación del 28, al morir el dictador Juan Vicente Gómez, se encargó de dirigir las luchas populares en Venezuela. Solicitaban elecciones universales, directas y secretas; derecho a la educación, industrialización del país, participación en los ingresos petroleros. Es decir: Sembrar el petróleo, como maravillosamente planteó Alberto Adriani y acuñó Arturo Uslar Pietri.

Luego, Rómulo Betancourt fue perseguido por el régimen de López Contreras, se mantuvo enconchado varios años – por cierto, escribiendo artículos diarios bajo seudónimo. Finalmente fue capturado por un grupo policial entre los que curiosamente se encontraba Pedro Estrada, futuro esbirro mayor de Pérez Jiménez. Y tomó rumbo a su segundo exilio.

Como dato curioso: RB en 1936 ejerció el cargo de Jefe de Servicios en el Ministerio de Agricultura y Cría.

EL 18 DE OCTUBRE

RB regresó al país cuando el gobierno de Isaías Medina Angarita, continuó su actividad política y contribuyó a fundar Acción Democrática. Ya los militares encabezados por Delgado Chalbaud, Pérez Jiménez, los hermanos Vargas, Edito Ramírez y otros planeaban la salida abrupta del gobierno. Para ello, invitaron a Betancourt y a otros líderes de AD.

Los dirigentes adecos Raúl Leoni y Rómulo Betancourt, ante la inminencia de una solución de facto y tratando de evitarla, se trasladaron a Washington a conversar con el Embajador Diógenes Escalante. Acordaron apoyar al doctor Escalante en las elecciones presidenciales, y éste se comprometió a implantar las elecciones universales, directas y secretas.

Cuando su secretario de prensa Ramón J. Velásquez, manifestó que el candidato Diógenes Escalante le había dicho que no podía asistir a una reunión porque “no tenía camisa”, se encendieron las alarmas …

Ante la inhabilitadora enfermedad mental del doctor Escalante, Medina Angarita seleccionó como nuevo candidato presidencial al ministro de Agricultura Ángel Biaggini, que resultó un “Ángel in ángel” y no fue aceptado por el estamento político opositor.

Se reanudaron las acciones golpistas. El 18 de octubre el presidente Medina fue derrocado por una alianza de AD con los militares. Rómulo Betancourt fue designado como presidente de la Junta de Gobierno.

RB siempre planteó que el 18 de octubre no fue un golpe sino una revolución. Lo cierto es que, en esos años que coincidieron con vertiginosa alza de la producción petrolera y por ende de ingresos al fisco, hubo avances en la educación, en infraestructura, libertades, sanidad, participación en ingresos petroleros. Fue un período próspero.

La Junta de Gobierno prohibió que sus miembros fueran candidatos presidenciales en las siguientes elecciones. En 1947 fue electa - con votación universal, directa y secreta - una Asamblea Constituyente, presidida por Andrés Eloy Blanco, y en 1948 Don Rómulo Gallegos fue electo presidente de la República. Duró a apenas nueve meses en el gobierno.

Fue derrocado, en general, por los mismos militares que los habían ayudado a llegar al poder en 1945.

OTRO EXILIO

Betancourt fue aventado a su tercer exilio. El partido AD fue proscrito a los pocos días del golpe y pasó a la resistencia, donde fueron sacrificados muchos de sus valiosos dirigentes y militantes.  

Delgado Chalbaud quedó como presidente de la Junta Militar de Gobierno. Quiso hacer elecciones y eso le costó la vida tras su secuestro en noviembre de 1950.  Pérez Jiménez se convirtió en el hombre fuerte. La Seguridad Nacional encarceló, torturó y desapareció políticos, de la mano del terrible Pedro Estrada. Centenares de exiliados.

En 1958, a la caída de la dictadura, RB estaba en Nueva York viviendo muy modestamente. Una anécdota refleja la escases de fondos: cuando debían regresar a Venezuela, su secretario privado, Edilberto Moreno, no tenía un flux adecuado. Betancourt le dio la plata de unas camisas que tenía que buscar en la tintorería.

De la honestidad de los líderes de la época da pie la siguiente anécdota: en 1958 Betancourt, Villalba y Caldera fueron a almorzar a un famoso restorán caraqueño. RB pagó la cuenta de sesenta bolívares con un cheque… que rebotó. ¿Qué tal?

Igualito a la chicha de carrito… diría Perucho Conde.

PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA

En las elecciones de diciembre de 1958, RB ganó la presidencia de la República. Previamente había firmado el Pacto de Punto Fijo con los líderes fundamentales Caldera y Villalba.

Su gobierno fue honesto y valiente. Enfrentó el Barcelonazo, el Porteñazo, el Carupanazo. La derecha, los militares y la izquierda querían derrocarlo. Fue un triunfador sobre las dictaduras y las rebeliones.  Lucho contra las guerrillas financiadas y dirigidas por Fidel Castró. La llamada Su llamada Doctrina Betancourt prohibió tener relaciones diplomáticas con las dictaduras. Sobrevivió a un feroz atentado contra su vida.

Ante los avisos “RR” (Rómulo Renuncia) que la subversión pintaba en las paredes, planteó con su estridente y antipaticona voz: “ni renunció ni me renuncian”. Entregó el gobierno a su copartidario Raúl Leoni el día pautado por la ley. “Ni un día más ni un día menos”, había dicho, y cumplió.

Durante el período gubernamental de RB creció la educación, la vivienda, la infraestructura. El crecimiento promedio del PIB anual fue más de 5 %. La inflación en el último año de su gobierno fue 0,75%. Y lo más importante, impidió la implantación del castro comunismo en Venezuela.

RETIRO Y MUERTE

Al entregar la presidencia, se fue a vivir a Europa. No quiso que pensaran que quería influir en la política local. En 1973, con apenas 65 años, no quiso ser candidato de AD. Murió en Nueva York en 1981.

SU LEGADO…

… La democracia como forma de vida. La honestidad. Su permanente estudio para desarrollar su gran capacidad de estadista. La formación de un partido policlasista que en su momento fue soporte de la democracia: AD. El Pacto de Punto Fijo y las alianzas con políticos democráticos. Su triunfo sobre las dictaduras y conspiraciones de toda índole. Su visión latinoamericanista…

Políticos como Rómulo Betancourt deben estar vigentes hoy y todos los días.  Por el bien de las democracias.